Castillo de Montánchez (Cáceres) ⭐⭐⭐☆☆

    Es un castillo muy bonito, que nos ha gustado mucho pero, si, tiene algunos peros, no tiene visitas guiadas y el interior no esta rehabilitado. Lo que si tiene son unas preciosas vistas de una basta extensión de terreno. El monumento está rehabilitado al menos por la parte de fuera y tiene el añadido especial de la ermita del castillo, del siglo XVII de estilo barroco. La ermita era en origen una iglesia visigoda convertida en mezquita por los almohades y una vez conquistada la villa, volvió al culto cristiano de la mano de los templarios.

    El origen del castillo se sitúa en el siglo X, en época califal y en su construcción se reutilizaron materiales visigodos para el aljibe y la muralla sureste de sillería granítica. De este tiempo es el cuerpo principal que se asienta en la cota más alta del cerro. El resto del edificio es de época almohade, del siglo XII, de éste período se conservan los tres aljibes y parte de su trazado. Al ser conquistado, se hicieron cargo de la fortaleza los caballeros templarios de la Orden de Santiago, en la segunda mitad del siglo XII, que añadieron nuevos muros al castillo. En el recinto interior se conservan, aparte de los dos aljibes interiores, la torre del homenaje y las bodegas. En el exterior se sitúa el aljibe mayor un estanque y la mencionada ermita. 

    Las postreras modificaciones de las ventanas dobles y de medio punto, son indicativos de la conversión del edificio de militar a palaciego. Para su fábrica se utilizaron mampuestos con ripios y cal de relleno. Muestra hasta cuatro líneas defensivas reforzadas con torres de distintas índoles y formas. La fortaleza muestra dos grandes recintos. Por un lado lo que es el alcázar propiamente dicho, que ocupa la parte alta del recinto, con altos muros y su estilo palaciego. Consta de plaza de armas, un patio rodeado de habitaciones, sala capitular y cocina. Otro patio en donde se sitúa la torre del homenaje y mas habitaciones.

    El recinto exterior, esta formado por lienzos y una torre de planta poligonal de las que se conserva algunas almenas y al norte se conserva otra puerta o poterna de arco apuntado. El castillo ha sido restaurado por las administraciones central y autonómica como reclamo turístico de la población extremeña. El interior sigue sin restaurarse y a meced de la vegetación.  En 1620 sirvió de prisión a Don Rodrigo de Calderón, mano derecha del Duque de Lerma. 

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