Pues os presento el Castillo de Oropesa, perteneciente a la provincia de Toledo, también llamado Castillo Viejo o, Castillo de los Álvarez de Toledo. El castillo Viejo, se convirtió en 1930 en Parador Nacional, y fue el primer monumento histórico en formar parte de la red de Paradores Nacionales aunque fue suprimido poco después. Fue en 1966 cuando se instauró el actual Parador Nacional en el Palacio Nuevo. El castillo Viejo es visitable por un precio módico y se encuentra muy bien conservado. Primeramente hicimos una visita por el exterior, admirando sus grandes torres y lienzos, luego decidimos entrar a verlo por dentro ya que la belleza que teníamos delante nos invitaba a ello.
Los primeros escritos sobre éste emplazamiento datan del siglo XIII, en tiempos de Alfonso X, El Sabio, pero es probable que el castillo fuese construido sobre una fortificación musulmana anterior y, ésta a su vez, sobre una construcción romana. La villa de Oropesa y su castillo, fueron entregados a D. García Álvarez de Toledo al renunciar éste al título de Maestre de la Orden de Santiago, renuncia pedida "amablemente" por el rey Enrique II, que quería nombrar a un "amiguete" maestre de la Orden. En 1402, los Álvarez de Toledo construyeron el Palacio Nuevo (lo que hoy es el Parador Nacional de Oropesa), punta de lanza de las construcciones religiosas y civiles como iglesias, conventos o colegios que posteriormente fueron construidas a su alrededor y, que todavía se conservan.
El monumento fue testigo de varias guerras, una de ellas en la que estuvo del lado de Juana, la Beltraneja en la guerra de sucesión al trono de Castilla tras el fallecimiento de su "padre" Enrique IV con su tía Isabel (La Católica). Posteriormente, en la Guerra de las Comunidades de Castilla, también, los Álvarez de Toledo se posicionaron del lado perdedor junto a Juan Padilla contra el Rey-Emperador Carlos V. Personajes ilustres que vivieron en el castillo fueron, el propio Juan Padilla, Santa Teresa de Jesús y San Pedro de Alcántara.
El monumento y el condado pertenecieron a la familia durante cuatro siglos. A principios del siglo XIX, extinguido el linaje familiar, el señorío paso a propiedad municipal, aunque posteriormente los Duques de Frías, lo reclamaron y obtuvieron en 1806. Durante la Guerra de la Independencia, fue saqueado por las tropas napoleónicas en 1808 dejándolo muy dañado, como era habitual. Los Duques de Frías, acabaron vendiéndoselo al ayuntamiento en 1812 que lo destinó a plaza de toros. Posteriormente, fue el Estado Español el que se hizo cargo del recinto que lo habilitó como casa cuartel de la Guardia Civil.
El castillo Viejo y el Palacio Nuevo (el parador), hacen un conjunto de los mas hermosos de la provincia de Toledo y, me atrevería a decir que de toda la Nación. Fueron construidos con piedra, de sillarejo (menos elaborada) para los muros y los sillares (mas elaborados) para las zonas mas nobles y visibles.
En definitiva, uno de los castillos mas bonitos que te puedes encontrar por la geografía española, visitable a un precio módico y con unas vistas espectaculares de toda la comarca.
!!Ya sabes, conoce y vive España!!
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