Castillo también llamado De la Vela, es un precioso monumento, pero al que no le doy las cinco estrellas al encontrarse cerrado al público a pesar de pertenecer al Ministerio del Interior. El castillo se encuentra bien rehabilitado y es del siglo X, mandado a construir por Almanzor. El recinto se puede ver por fuera por todo el perímetro y es accesible en coche. Justo en el lado oeste hay unos jardines. El castillo llama la atención de todos los viajeros de la A5, que pasa muy cerca.
La puerta se encuentra en el lado norte y porta el escudo de los Cárdenas Enríquez que fueron los que reconstruyeron la fortaleza en el siglo XV sobre la del siglo X. Probablemente existió un emplazamiento romano en este mismo lugar. El Castillo de Maqueda cayó sin oponer especial resistencia ante el rey castellano Alfonso VI en 1083. Pasó a ser señorío en 1153 para Fernando Yáñez por concesión real. Poco después, el rey Alfonso VIII lo donó a la Orden de Calatrava tras la caída de Cuenca en 1177. Fueron los Calatravos en el siglo XII, los que rodearon la villa con murallas defensivas para proteger la Iglesia Mayor y que hoy están desaparecidas pero, de las que quedan los restos de la Torre de la Vela y la de Las Infantas.
Entre 1196 y 1198 la villa y su castillo fueron asediados por los almorávides aguantando estoicamente. En 1434, el valido de Juan II, don Álvaro de Luna se apropió de Maqueda y Silvestre dándole a cambio Arjona y Arjonilla (Jaén) a los calatravos. Cuando cayó el valido, Juan II puso sitio al castillo recuperándolo para la corona castellana. Tras la Farsa de Ávila, el rey Alfonso se lo cedió junto al señorío a judeoconverso, Alvar Gómez que se lo cambió al Cardenal Mendoza por varias villas en Guadalajara. A su vez, éste se lo cambió al arzobispo de Toledo por Jadraque y Alcorlo. Poco después, el arzobispo se lo vendió a Gutierre de Cárdenas que fue el que lo reconstruyó.
El interior del castillo no fue terminado en su totalidad y permaneció en la familia Cárdenas hasta el siglo XIX, cuando se abolieron los señoríos. Anteriormente el castillo permaneció abandonado cuando los señores se trasladaron a Torrijos, empezando a deteriorarse rápidamente. Fue utilizado como cuartel de la Guardia Civil hasta hace relativamente poco tiempo. La propia reina Isabel la Católica vivió en este monumento durante algún tiempo junto a la futura marquesa de Moya Dña Beatriz de Bobadilla, su amiga de juventud.
El Ministerio del Interior pretende venderlo, por lo que lo ha puesto en subasta pública en varias ocasiones sin éxito. A mi modesto entender, debería comprarlo bien la comunidad manchega o bien el consistorio de la localidad para ponerlo en valor y que pueda de una vez por todas ser visitable al público.
¡¡Ya sabes, conoce y vive España!!
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