Castillo Mayor en Daroca (Zaragoza) ⭐⭐⭐⭐☆

     Realmente, al castillo no subimos porque está bastante en ruinas y es difícil subir. La buena puntuación le viene dada por el pueblo en si, y por su muralla. Este castillo también es llamado Castillo de la Morica Encantada y se encuentra en lo alto de un cerro que domina la población maña. Era una alcazaba del siglo XI. El origen de la población es el pueblo celtíbero de Daroga, al que llegaron los musulmanes en el siglo VIII. Durante el siglo IX, se empieza a construir su muralla, que es la más larga de Aragón. 

    Tras la conquista de Daroca por los almorávides, en 1110, Aben Gama se convirtió en rey musulmán de la población y mandó construir un palacio con la idea de habitarlo con la bella Melihah, pero ella tenía un romance con una preso cristiano del rey moro, Jaime Díez de Aux. Cuando Alfonso I, El Batallador, rey de Aragón, conquista la población, libera a don Jaime que enseguida busca a su amada para liberarla de Aben Gama y casarse con ella, pero el rey moro, la mata y la arroja al pozo del castillo. Todos los días, don Jaime subía al castillo y  pasaba las horas junto al pozo, lamentando su pérdida. Se dice que Melihah sale todas las noches con una luz, vestida de blanco, buscando a su amado. Ésta es la leyenda que le da al castillo su otro nombre, Castillo de la Morica Encantada. 

    El castillo, como decía está muy deteriorado, en gran parte debido a la orden de Felipe V que mandó desmantelarlo en 1705 por el apoyo de Aragón al Archiduque Carlos durante la Guerra de Sucesión. El palacio estaba construido con mampostería, de planta rectangular, defendido por torreones cuadrados. Durante las Guerras Carlistas, a principios del siglo XIX, el recinto fue ocupado y utilizado como cuartel, por lo que hubo de construirse nuevas estructuras, ya que el palacio estaba prácticamente en ruinas y, lo que queda actualmente es de esa época. 

    Bajo la torre, hay un túnel muy profundo e inclinado, con escalones tallados en la piedra que fue realizado para buscar aguas subterráneas y que se dice que llegaba hasta la ciudad. Ahí es donde dice la leyenda que fue arrojada Melihah tras ser asesinada. La muralla es una joya de la comunidad aragonesa, cuenta con hasta ciento catorce torreones, en distintos estados de conservación, a lo largo de los casi 4.000 metros de su recorrido. El recinto pertenece en la actualidad al ayuntamiento y el acceso es libre. 

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