Es una fortaleza del siglo XVI de estilo renacentista. Está situado en el mismo centro de la población, a pocos metros de la playa y del puerto. Está abierto al público de forma gratuita y dentro hay exposiciones relacionadas con el pasado marítimo de la villa, la Capilla de la Virgen de Loreto, patrona Santa Pola y un aljibe, todo ello alrededor del gran patio de armas de la fortaleza. Lo mandó construir en 1557 el Virrey de Valencia, Bernardino de Cárdenas para defensa de la población marinera de los ataques de los piratas. Hoy en día es el centro cultural del municipio.
Tuvo un coste de 23.000 ducados, sufragados por el Duque de Maqueda y Virrey de Valencia. Todo el recinto ocupa un gran cuadrado con dos baluartes y dos torreones de sillería, el primer torreón se utilizó como palacio del duque hasta el siglo XVIII. Los dos baluartes eran el del Duque y el del Rey y tienen muros exteriores inclinados rematados por una moldura que rodea todo el recinto. Los muros son ciegos por la parte exterior, siendo el interior el que mostraba las puertas y ventanas de las viviendas de los soldados. En 1778 el Alcaide del castillo, notifica al Duque de Arcos las carencias de la fortaleza para los menesteres de defensa de la población antes las continuas alarmas de ataques de piratas. En comunicación con el Rey, el duque obtuvo la promesa de ayuda supeditada a un informe exhaustivo del estado del castillo.
En 1786, se procedió a su desarme y se incorpora a la Corona por cesión de la titularidad del mismo. Por eso hay en la puerta principal un escudo del siglo XVIII con las armas reales. El 3 de mayo de 1855, se abandona la fortaleza y se ordena su demolición salvada por el Alcalde de Santa Pola que solicita su cesión al Ministerio de Guerra diciendo que quiere construir en el recinto una iglesia y la aduana. El castillo pertenece al consistorio desde 1859 que inició obras encaminadas a que el castillo perdiera su imagen de fortaleza, instalándose en su interior el consistorio en 1860. Antes de terminarse el año, se instaló el reloj sobre la bóveda del azguán. Se siguió haciendo reformas como abrir en los muros exteriores ventanas y balcones, entre otras muchas reformas. Estuvo sirviendo como consistorio hasta 1980, cuando se trasladó a su nueva ubicación frente al mar.
Como elementos de interés tenemos el acceso principal que ha sido restaurado recientemente y las cañoneras desde donde se disparaba la artillería. Desde entonces, el castillo ha servido como cuartel de la Guardia Civil, Juzgados, Hospital e incluso de plaza de toros. Actualmente también acoge las fiestas de Moros y Cristianos y otros eventos populares. A partir de 2025, se podrá disfrutar de una actividad de realidad virtual en donde podremos ver la fortaleza en tres épocas históricas diferentes. Una ventana al pasado a la que los visitantes podrán asomarse y conocer la historia de esta fortaleza.
¡¡Conoce y vive España!!
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