Un bonito castillo, también llamado Castillo de los Bañales, al que no pudimos ver por dentro porque sólo abre los domingos de 11 a 13:30h (a mi modesto entender, un horario demasiado reducido), pero que disfrutamos mucho viéndolo por fuera. Tiene recios y altísimos muros y torres. aunque no es demasiado extenso. Es de planta cuadrangular y se encuentra bien rehabilitado y conservado, al menos por fuera. Su entrada es de arco de cañón hecho con sillares. Todo el conjunto está hecho con sillarejo.
Su construcción data del siglo XIII siendo una de las joyas de la comarca de las Cinco Villas y es uno de los edificios medievales mejor conservados de la comunidad aragonesa. El acceso al monumento es sumamente sencillo a pesar de estar en un promontorio. No tiene otras edificaciones cercanas, por lo que podrás disfrutar del monumento desde una pequeña distancia, dando fé de su magnífica fábrica.
La población se encontraba a las faldas del castillo, pero en el siglo XV, se trasladó al otro lado del Río Arba. La zona de Sádaba se empezó a repoblar en el siglo XI que ya contaba con un castillo fundado por Alfonso I, El Batallador, rey de Aragón, pero ese no es el castillo que hoy podemos disfrutar. Durante la minoría de edad del rey Jaime I de Aragón, Armando de Alascún, tiranizaba a la población de Sádaba y hacía correrías por la vecina Navarra, por lo que Sancho VII, El fuerte, rey navarro, "puso Sádaba bajo su protección" en 1215. Sádaba volvió a dominio aragonés en 1261 por solicitud vecinal.
Está visto que al ubicarse en la frontera con el Reino de Navarra, ésta población siguió pasando de un reino al otro en varias ocasiones hasta que en 1399, los vecinos compraron su libertad y no volvieron a salir de Aragón, aunque si sufrieron en 1452 ataques navarros al igual que otros lugares de la zona. El castillo, no muestra elementos defensivos como la torre del homenaje, el foso o la barrera, tampoco tiene gran número de saeteras y no posee matacanes, cosa que, siendo frontera y estar en liza entre dos reinos más de una vez, no me puedo explicar.
Como únicas defensas, destacan sus altos y gruesos muros y torres almenados y provistos de adarve, además de la entrada en codo de influencia árabe. Su arquitectura obedece a una nueva moda proveniente de Europa bautizada como Fórmula de Felipe Augusto, consistente en una ciudadela defendida por torres y muros inexpugnables. Presenta en su perímetro con siete grandes torres ubicadas de forma irregular y muy distintas entre si. Eso si, hay una de ellas en cada una de las esquinas del cuadrilátero, la que está situada en la esquina suroeste, es la llamada Torre del Rey, un poco mas grande que el resto y es la que acoge la entrada al recinto.
A su lado, al otro lado de la puerta, se encuentra la Torre de la Reina. Las estancias y salones se encontraban al oeste y al norte del edificio. En el patio de armas, destaca el aljibe, con tres arcos apuntados cuya bóveda no se conserva. Durante algún tiempo, el castillo perteneció a la Orden de San Juan que dejó una cruz de Malta en la puerta de la capilla. El recinto fue escenario de numerosas guerras. En el siglo XVI se abandona y comienza su deterioro. Actualmente es propiedad de la Diputación General de Aragón que está a cargo de su mantenimiento y conservación.
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