A pesar de que ya era bastante tarde, continuamos hacia Torredonjimeno para ver su castillo al que solo pudimos ver por fuera y hacerle algunas fotos. El castillo se encuentra rehabilitado, es visitable, pero al estar en el centro del pueblo y rodeado de casas, solo se le puede ver por la parte de la entrada.
Volvimos unos meses después por la zona, y no quisimos dejar de ver este castillo por dentro, por lo que nos acercamos para ello. El castillo no tiene un guía, pero tiene, al menos cuando estuvimos nosotros, un guarda jovencito, Manuel, que nos estuvo explicando muchas cosas, siempre con un ojo en la puerta, por si venía alguien mas.
Vimos el museo, restos de uno de los molinos, el palacete, los jardines y subimos a la torre del homenaje. Está todo muy limpio y bien acondicionado y restaurado.
Es de construcción Almohade de los siglos XI y XII. Al pasar a manos cristianas en el siglo XIII, se amplió, se le dio forma rectangular, se construyeron torres de forma circular en sus esquinas y su entrada también se reformó. La luchas de frontera hizo que en el siglo XIV se reforzaran sus defensas construyéndose alrededor de la ciudad una muralla defensiva, en el lado mas débil se construyo un foso y un nuevo muro en forma de talud.
Al desaparecer su función militar, sus moradores rehabilitaron el castillo como residencia siendo abandonadas las torres que se fueron deteriorando, y el el siglo XVIII parte de sus materiales fueron usados para construir dos molinos y nuevas dependencias para su residencia.
¡Conoce y vive España!
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